jueves, 25 de mayo de 2017

vivir con condiciones.


 El cambio de clima, comida y hábitos podrían ser la causa de ese molesto dolor en el oído. Sin embargo, esa mañana cuando abrí los ojos apareció esa incomoda nube que se forma entre lagañas, falta de sueño y que te hace ver todo súper  borroso. Frote mi ojo izquierdo una y otra vez  tratando de aclarar la visión pues se nos hacía tarde para irnos a trabajar, pero esa nube incomoda hasta el día de hoy no se ha disipado.
Recién aterrizados  en un nuevo país, sin seguro médico y con la más mínima idea de cómo funcionaba el sistema de nuestro nuevo lugar de residencia, acudí a una cita con un optómetra que apunto a decir que yo tenía una infección de las vías respiratorias altas. El tiempo siguió pasando y el tratamiento de corticoides no había funcionado, al contrario hacia esa incomoda nube  más y más opaca y yo solo pensaba  ¡Jueperra que infección tan vergaja!
Lo primero que hicimos al adquirir un seguro médico fue pedir una cita con un oftalmólogo a ver si podía encontrar la razón de esta infección que me tenía viendo por un solo ojo.
El doctor Pérez me sometió a 7 distintos exámenes con unos artilugios que nos mostraban la realidad del problema. Una herida y una lesión estaban provocando que la presión del ojo se subiera a niveles altos que afectaron  mi visión.
El Dr. Pérez me preguntó ¿usted ha sufrido de algún golpe  en esta parte del ojo, la cien o la cabeza?
Ahí empezó mi memoria a buscar en sus archivos los momentos en los cuales haya sufrido un golpe, no fue por hacer travesuras cuando era niño, no fue un cabezazo jugando futbol porque nunca fui bueno para cabecear, definitivamente no era una juetera¨ por haberme ido mal en el colegio, pero entonces  ¿Qué carajos había pasado?
Llego a mi cabeza el recuerdo de esa mañana de viernes que me dirigía a la casa de mi abuela para almorzar y contarle que ese era mi último día de clases en la Universidad y muy pronto estaría graduándome,  en la mitad del camino a casa de mi abuela (10 minutos caminando desde mi casa) un granuja y su compinche en moto me arrinconaron y allí comenzó la debacle.
¡Páseme el celular o se lo estallo!  Exclamo el tierno canalla mientras acariciaba la cacha de un revolver
¡Fresco, ya se lo paso! le dije cagado del susto.
Antes de que reaccionara o intentara gritar o correr, el golpe seco en el lado izquierdo de mi cara me tumbaba las gafas y me demostraba que el vergajo estaba más nervioso que yo.¨
Después de varios cariñitos que me propino el facineroso, se embolsilló  el celular y arrancaron sin pena ni gloria en su puerca moto. Y fue allí cuando pude responderle al Galeno en que momento de la vida había recibido un golpe,

Desde ese momento comprendí que no había tenido ninguna infección ni nada de esas cosas, aprendí que de ahora en adelante tenía que vivir con una condición médica llamada Glaucoma. Si para usted el término es nuevo, el nervio óptico sufre daños irreparables cuando el líquido del ojo no tiene por donde drenarse y hace que la presión del ojo aumente. Es considerada una de las primeras causas de ceguera en el mundo y no tiene cura, puede tener tratamiento para frenar el avance de la enfermedad pero hasta ahora no se ha podido dar con una cura total.
No ha sido fácil tener que vivir con esta condición, no es fácil aceptar y comprender como la vida nos cambia de un momento a otro. Pero también  empiezas a valorar lo que tienes, lo que ves a diario, las personas que te rodean, adquieres hábitos de cuidado y protección, te vuelves un  todo un experto en lo que a tu condición se refiere y te adaptas a esa nueva forma de vivir.
Yo se y tengo fe de que la medicina y la tecnología avanzan a diario y que tal vez algún día habrá una cura, mientras  tanto seguimos apuntando hacia adelante, seguimos convencidos que la batalla contra el Glaucoma no ha acabado y que nada, ni siquiera una condición médica puede arrebatarte tus sueños, metas  e ilusiones.



martes, 9 de abril de 2013

El día de la despedida.



 Muy mentiroso sería si les digo que para lograr cumplir este sueño no nos tocó comer de la buena * siiii de la que sabemos* lo que NUNCA nos hizo falta, fue una actitud más grande y positiva que la del padre Linero, Jorge Duque Linares, Igor y el mismísimo profesor Moncayo. La mañana de ese 13 de abril me mostraba que para llevar a cabo un sueño es necesario dejar todo en la cancha, dar hasta la última unidad de energía que el cuerpo pueda producir, meterle el Cuatro letras  para que cada día más el sueño tome forma y se haga realidad.  Mis maletas atiborradas de ropa, dulces, pastillas de omeprazol y una que otra carta de mis familiares y mis chinitos *no mis hijos… mis primitas, las primitas de mi esposa y mi lindo enano- ahijado* que han sido súper importantes pues me han sacado sonrisas y me han llenado de fuerza en los momentos en los que de tanto extrañar a su gente y sus cosas uno tiene el alma untada de mierda.
 No sabía para quien serían mis primeras lágrimas y mis primeros abrazos que hoy día quisiera que hubieran sido eternos, me desubicaba más el mirar alrededor y darme cuenta que de mi familia no había un solo rostro sonriente que me llenara de paz para emprender el viaje. Después de unos minutos eternos y dolorosos que no voy a poner acá para que no me tilden de chillón, ahora bien pueda haga la fila quítese hasta los zapatos, pase por la máquina, recoja sus cositas y espere al agente de migración    cada vez que el agente de migración se engorilaba con una que otra asistente de vuelo pa´ coquetearle, yo me daba la vuelta y me despedía con las manos sin saber si mi querida familia me seguía viendo *no por cegatones o alg así* lo que pasa es que ya estaba alejado de la puerta donde cada hora tienen que pasar el trapero por la cantidad de lagrima y moco  que salen de las familias y de los emigrantes que venimos a buscar futuro fuera de nuestra amada Colombia.

Luego de semejante fila pa´ recibir un certificado donde conste que usted no es un vergajo en Colombia y que no se preocupen porque no le debe a nadie, me invadió el sentimiento de rabia por darme cuenta que entre mis ajuares no llevaba una cajita de aguardiente y unos *chitos* para no sentirme lejos de casa. La solución fácil fue  de acercarme a un toldo de esos antes de llegar a la sala de embarque y pedir el fiambre que me hacía falta. DESALMADOS, CACOS, CASOLETOS, PERCLORITRICOS, MONOTREMICOS, HIDROFOBICOS, HIJUEP….  ¿Cómo me van a sacar 27.000 pesitos por media de aguardiente verde y un paquete grande de chitos?? En fin, ya después de ese atropello que no tiene presentación alguna es que ha comenzado en serio nuestra vida en la YUMA *United states, mayamis, estados unidos, la jaula de oro.*